El amor y Cruz Coke están de moda

“El amor está de moda”, así se llamaba la primera teleserie en la que debutó Luciano Cruz Coke, futuro flamante Ministro de Cultura.

Sinceramente su primer acercamiento a la pantalla chica fue lamentable, sin embargo su acuicada figura desgarbada, donde destacaba su aguileña nariz, cayó bien a las féminas y no tuvo problemas para ganarse el titulo de galán en las realizaciones dramáticas del canal católico.

Y después vino “Amor a Domicilio” en donde las hacía de Benjamín, un irresponsable administrador de una pizzería, sobrino de Gaspar el dueño. Y más tarde en “Fuera de Control” como el rebelde sin causa Axel Shumacher, un ochentero adolescente realmente desagradable, que con la llegada de la democracia se convierte en un talentoso y atribulado Director de cine.

En la actuación nuestro futuro Ministro fue de menos a más. Se matriculó en la prestigiosa academia de teatro, Lees Strasburg Theater institute de New York y desapareció del país por unos años, y el otrora rebelde Shumacher regresó al terruño como un actor hecho y derecho, lo que le significó, una lluvia de ofertas cinematográficas.

“Se arrienda” dirigida por el escritor Alberto Fuguet fue su opera prima, rigurosa metáfora fílmica de cómo en un país como Chile, se hace imposible seguir nuestras convicciones y terminamos por vendernos, o arrendarnos a un sistema que nos carga. De la mano del mismo Fuguet, vino “Dos Hermanos”, un filme algo cliché que pasó sin pena ni gloria.

Lo último que supe de él artísticamente, que esta haciendo muy buenas obras de teatro, es más, fundó y es Director del teatro Lastarria 90. Durante la campaña presidencial de Piñera en varias oportunidades habló de la necesidad de instalar el producto cultural chileno en los mercados Internacionales, fortaleciendo la industria cultural.

Ojala no se le olvide al nuevo Ministro-como si fuera un texto teatral-que las manifestaciones artístico culturales de un pueblo no se miden por resultados cuantitativos, menos noticiosos y mucho menos en los pesos que por ello se reportan, ya que las manifestaciones deben emanar de forma natural, como consecuencia de los múltiples procesos histórico sociales que irremediablemente nos toca vivir.

El célebre Alfred Hitchcock dijo en una oportunidad que los actores son el ganado que debe acarrear el director, obviamente de esa frase desgajan excepciones.

Santiago Bonhomme, Escritor