lunes, 13 de febrero de 2006

Principio y Fin



En 1925 nació en Antihuala, Provincia de Arauco, Julio Escámez Carrasco, Pintor, Grabador y Escenógrafo. Se le define como un agudo observador de la naturaleza que ha sabido volcar al papel, a los muros y a la tela sus observaciones, sus visiones, su vivir.

En 1955 Concepción le otorga el premio Municipal de Arte y en 1968 su ciudad natal lo nombra Ciudadano Ilustre.

En 1970 vuelve a Chile desde Asia. Inicia el mural “Principio y Fin” en la Municipalidad de Chillán. Algunos definen su obra por su observación del comportamiento humano, su compromiso social y su búsqueda incansable de la magia y el color del pueblo americano. Sus obras reflejan identidad, como las faenas de la tierra, de su provincia natal y de los oficios marginales.

En 1972 se inauguró este mural que comenzaba en el primer piso y por el muro de la escalera llegaba hasta el segundo piso del edificio Municipal.

En 1973, un grupo a amigos de Neruda se reunían para compartir las penas por la muerte del Poeta. Uno de ellos, Máximo Pacheco (ex ministro de Educación) dice: “Han destruido (los militares) el mural de Julio Escámez en la Municipalidad de Chillán”. Le preguntan si lo pintaron para cubrirlo. “¡No! Lo picaron...”.

En ese mural, el pintor Escámez expresó su aversión a las consignas y a la obra plástica falsamente revolucionaria tratando de aprisionar toda la lucha de América desde la conquista hasta ahora, la deshumanización del sistema capitalista, el hombre disminuido dentro del aparato mecánico; en un área estaban representadas las imágenes de la enajenación que oprimen el alma; el poderío militar donde las fuerzas represivas del conquistador se funden con las modernas. La riqueza de símbolos de esta obra resume el intento de expresar el conflicto entre la vida y la muerte, entre las nuevas formas de nobles relaciones que establecerán los hombres y las viejas formas caducas e inhumanas...

Otras fuentes agregan que no se conformaron con picar el mural de Julio Escámez, pues demolieron el muro mismo y reformaron ese recinto de la Municipalidad.

Es importante recalcar la fuerza, el poder, la energía que tiene el arte como para generar este miedo de los uniformados. Miedo al trabajo de los creadores culturales, de los colectivos de artistas, de quienes hacer ver lo que sienten.

Este mural ya no existe, solo nos acompañan algunos registros fotográficos. Hoy Julio Escámez es profesor en la Universidad de Costa Rica y cada año viaja a Chile para mantener el contacto con su Antihuala, con su gente.

Apoyemos la creación, seamos creadores
Participemos en actos culturales, seamos actores
Defendamos los artistas populares, seamos luchadores.

Publicado por: Richard Pincheira Aedo - Director ChillanActivo