sábado, 10 de noviembre de 2007

Hidroeléctrica en San Fabián, ¿si o no?

La construcción de la central de paso de la Compañía General de Electricidad Generación depende actualmente de la decisión que adopte el Consejo de Ministros de la Conama respecto de las reclamaciones presentadas por la entidad privada.

La eléctrica que pretende construir una central de 136 megawats en San Fabián (con una inversión de US$ 160 millones), impugna cuatro medidas que impusiera la Corema del Bío Bío cuando le dio autorización para llevar adelante el proyecto hidroeléctrico. De las cuatro, tres son definitivamente relevantes para tomar la decisión de construir.

Una de ellas está referida a la construcción de un camino paralelo a la carretera desde la ruta norte-sur a la central, de 65 kilómetros aproximadamente lo que se considera como “no razonable”.

Además, se habla de crear una mesa de trabajo público-privada durante la construcción, cuyo objetivo sería analizar “temas vistos y no vistos” durante el estudio ambiental y por lo tanto, sostienen ejecutivos de la firma, “más que mesa de negociaciones es un caos”.

Ello, porque entregaría a entes tan diversos como municipalidades, juntas de vecinos, servicios públicos y diversos agentes prerrogativas demasiado amplias y surgirían posiblemente aspectos no vinculados al tema en cuestión de tal forma que se buscaría obtener beneficios que no son posibles obtener por las vías normales.

Adicionalmente se establece que la definición del caudal ecológico estaría supeditado a una revisión a cinco años y a un posible aumento, lo que atenta con la seguridad de suministro que se requiere.

“Estamos rezándole a todos los santos para que prospere lo racional, lo razonable y el proyecto pueda ejecutarse en términos razonable y no haya condiciones antojadizas o mal informadas y que las decisiones sean las que corresponden y que prime lo racional, pues el proyecto es limpio y es seguro para la gente”, sostiene José Antonio Contreras, gerente del proyecto.

Indicó que hay temores en la gente de algunos sectores por eventuales rodados que se podrían producir en la zona montañosa por donde irá el canal.

Pero indicó, la obra se diseñó bien y para dejar tranquila a la gente tomaron una asesoría especial en el cerro Alico y ella indicó que no hay elementos que se pudieran desprender.

Las obras, reconoce la compañía, deberían haberse iniciado en el segundo semestre de este año, pero en el mejor de los casos los trabajos se reprogramaron para la segunda mitad del 2008.

La empresa no ha señalado si abortará el proyecto y sólo indica que están a la espera de lo que resuelva la instancia ministerial.

Publicado en La Discusión de Chillán.

Fotografía: Richard Pincheira Aedo. Valle del Río Ñuble en San Fabián.

1 comentario:

gonzalo llanos dijo...

por ningun motivo

nad mas qe decir, definitivamente no

es un paraiso espectacular